Trabajamos con el constructor acrílico, comúnmente conocido como “porcelana”. Es un material duro y resistente con el que podemos moldear la uña al gusto de la clienta: larga, cuadrada, almendrada, stiletto, bailarina… Cuando realizamos construcciones nuestro esmaltado aguanta perfecto hasta la siguiente sesión. El mantenimiento de este tipo de servicio se realiza cada 3 semanas debido al crecimiento natural de la uña, preservando así su salud.